
La Cueva Blombos se encuentra cerca de Still Bay, en la costa oriental de Sudáfrica. Está localizada en un acantilado, sobre el Océano Índico y hace unos 90.000 años. Los hallazgos muestran que los seres humanos que vivían en la cueva de Blombos fueron capaces de pensar de forma creativa y abstracta mucho antes de lo que se pensaba, según los investigadores. Pero otros expertos disputan esta teoría. La abundancia de restos de conchas y otros animales (peces grandes, un delfín, antílopes y al menos un hipopótamo y un rinoceronte) indica sus avanzadas técnicas de caza y pesca, así de la eficiencia en la recolección de moluscos: son los pescadores más antiguos que conocemos. Ordenaban el espacio de la cueva según su uso, como zona común o como talleres de talla de huesos y piedras. Y se han hallado más de treinta trozos grandes de ocre, un pigmento térreo que, molido, sería posiblemente usado como decoración corporal.